Llamamiento del Movimiento de Integración Racial Juan Gualberto Gómez (MIR) a todos los grupos y organizaciones del mundo que luchan contra el racismo

Hermanos:

Tengan todos un caluroso saludo desde Cuba y los convoco a que nos unamos para disminuir la desigualdad que existe en nuestras sociedades. Sensibilizándome con los afromexicanos y afroperuanos, les hago llegar estos videos tomados de Internet para que vean el nivel de pobreza y marginalidad que padecen. El Perú, un país de cholos y de personas que se creen blancas porque han sido educados en las diferencias raciales, sin haberles enseñado jamás la igualdad de las razas humanas o de la RAZA HUMANA, que es una sola, es el país más racista de América, donde lo afro queda al margen de los beneficios públicos y culturales; su televisión y su quehacer cotidiano lo demuestra.

Nuestra bellas mujeres, madres solteras, casadas o con otra condición enfrentan la doble discriminación, tanto por genero como por el color de la piel y solo son vistas como objeto sexual, como un buen mueble al que se puede ultrajar, y hasta matar cuando no nos convenga. Entonces, ¿que estamos esperando? ES HORA DE LA UNIDAD Y EL RECLAMO UNÁNIME AFRODESCENDIENTE.

Hermanos, debemos poner nuestro altruismo y voluntad activista a favor de nuestros derechos y plena y transparente emancipación.

"La necesidad—ha dicho Carlos Marx— da a los hombres la fuerza necesaria para solventarla; quien necesita ayuda, se ayuda por sí mismo. Las cosas no pueden quedar así, es necesario cambiarlas, y nosotros mismos, nosotros, hombres, tenemos que cambiarla".

Hagamos un Congreso Internacional y enviemos los acuerdos tomados a todos los Parlamentos y Presidencias de nuestros países; que sepan que aquí estamos y que no nos dejaremos mutilar psicológica ni socialmente en ningún momento. Vivamos el orgullo de ser seres humanos de la raza humana y con matices de piel diferente; pero seres con derechos. Presionemos para que se cumplan los acuerdos de la ONU contra el racismo, la exclusión social, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia. Que sepan que estamos dispuestos a dar la batalla de forma pacífica por la igualdad y el pleno reconocimiento social, apegados a la Declaración de la ONU.

Pienso que hacernos visibles en las redes sociales y desde allí librar la batalla denunciando aquellos casos de abusos, de discriminación y asesinatos, denunciando a los políticos corruptos, porque el racismo también constituye una corrupción y es desde la política por donde debemos entrarles al asunto.

Creo hermanos, que no es locura ni sueño inalcanzable pedirles que no se desmotiven y que se postulen a los parlamentos de sus países, que opten por una silla en los Parlamentos, porque lo más que puede suceder es no salir elegidos; pero si se hace conciencia en la población blanca no racista y entre los afrodescendientes, hacer conciencia, tocar el corazón de nuestra gente. De no ganar, al menos el voto afro queda entre nosotros y no va a aupar a un demagogo que una vez en el Parlamento hace de las suyas, olvida el compromiso y todo queda en el discurso, porque eso es lo que hacen la mayoría por quienes votamos. Y esa lucha es hoy más importante que nunca.

En Cuba es diferente, nosotros vivimos bajo un régimen que aunque ha dado beneficios los afrocubanos seguimos marginados en muchos aspectos. Ni siquiera tenemos el derecho de ser legalizados como Movimiento de lucha contra el racismo, ni siquiera eso.

Cuba es un país de muchos matices raciales y un solo matiz político, donde no hay la posibilidad que tienen ustedes, al menos de presentar candidatura. Aquí hay un solo partido y quien no esté con él es aniquilado social y políticamente. Los afrocubanos estamos en el último escalón de la espiral social. Eso es así, aunque hayan papagayos en el mundo que hablen maravillas de la revolución cubana sin saber a fondo las incógnitas sociales y mucho menos preocuparse por hacer un verdadero análisis sobre el diario vivir de la población afrodescendiente cubana

Aprovechemos este Decenio dedicado a nuestra herencia en América y hagamos un Congreso Internacional donde podamos tomar acuerdos que sean aplicables a todos los países con población afrodescendiente.

Si somos capaces de alcanzar acuerdos entre nosotros, seremos capaces de vencer a los soberbios y echar por tierra a los racistas.

Desde Cuba, un abrazo solidario del Movimiento de Integración Racial Juan Gualberto Gómez

Manuel Aguirre Labarrere

(Mackandal)

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